domingo, 24 de septiembre de 2017

Imprescindible






Que duro debio ser vivir en cualquier pueblo de esa tierra tan maravillosa!!!!
Mi solidaridad a los valientes y también a los cobardes, si se pueden llamar así a toda esa gente que tuvo que vivir allí, en esa época.
Recuerdo que hubo una manifestación en Sanlucar la Mayor repartiendo lazos azules, y yo me negué a ponermelo. Vino una chica y me recriminó. Le contesté que no me lo ponía porque no habría tenido valor de ponermelo en el País Vasco y que en consecuencia no me lo ponía aquí, tan lejos, donde era tan facil ponerlo.
Una anecdota

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo tampoco hubiera sido capaz. Lamentablemente soy cobarde.

maria dijo...

la cobardía es totalmente licita..sobre todo cuando se es cosciente de ella

ex lector de Ara&Buru dijo...

Yo tampoco me habría puesto el lazo azul, no por cobarde (que lo soy, aun sin ser consciente de ello), sino porque ese color me recuerda a josemaríaánsar (perdón).

Comencé a leer el libro (de infausto título) y me lo tuve que dejar a las 100 páginas por soso y blandengue, me recordaba los seriales de la tv de sobremesa.

Habiendo tenido la suerte de leer al donostiarra cuando comenzaba, con ese estilazo brillante y fulgurante que deslumbraba, me sabe mal que haya caído en una prosa tan decimonónica (no hablo del tema, sino la obra, que parece un remedo galdosiano sin altibajos).

En fin, no hay peor pecado...al abanderado